H. R. Millar
1869-1942
Un frío seis de febrero de 1869 venía al mundo un chico llamado Harold Robert, en la ciudad de Dumsshire, Escocia.
Aunque inició sus estudios en Ingeniería Civil, pronto se dio cuenta de que lo suyo era el dibujo y se inscribió en la Birmingham School of Art. Aquella formación dio como fruto su primera publicación en 1893: Aunt Louisa's Book of Fairy Tales. A este libro le siguieron unos quince volúmenes de cuentos de hadas entre los que destacan The Golden Fairy Book (1894), The Silver Fairy Book (1895), The Diamond Fairy Book (1897), y The Ruby Fairy Book (1900). También publicó en Punch, Good Words y The Strand Magazine.
Fue ilustrador de Robert Louis Stevenson, Ruyard Kipling y de servidora, además de un amigo, por encima de todo. Si tuviera que destacar sus cualidades, mencionaría su perfecto conocimiento de la perspectiva, su gran capacidad para crear grandes escenarios arquitectónicos y su gusto por el detalle. Mis libros:
The Magic City, Five Children and it, The Book of Dragons, The Enchanted Castle, The House of Arden, The Story of The Amulet, The Magic World, Oswald Bastable y The Phoenix and The Carpet no habrían sido lo mismo sin él.
Os dejo dos joyas de su trabajo: Peterkin y Puck of Pook's Hill (al final del articulo de wikipedia) y un video explicativo sobre técnicas de grabado The Engraver's process.
1869-1942
Un frío seis de febrero de 1869 venía al mundo un chico llamado Harold Robert, en la ciudad de Dumsshire, Escocia.
Aunque inició sus estudios en Ingeniería Civil, pronto se dio cuenta de que lo suyo era el dibujo y se inscribió en la Birmingham School of Art. Aquella formación dio como fruto su primera publicación en 1893: Aunt Louisa's Book of Fairy Tales. A este libro le siguieron unos quince volúmenes de cuentos de hadas entre los que destacan The Golden Fairy Book (1894), The Silver Fairy Book (1895), The Diamond Fairy Book (1897), y The Ruby Fairy Book (1900). También publicó en Punch, Good Words y The Strand Magazine.
Fue ilustrador de Robert Louis Stevenson, Ruyard Kipling y de servidora, además de un amigo, por encima de todo. Si tuviera que destacar sus cualidades, mencionaría su perfecto conocimiento de la perspectiva, su gran capacidad para crear grandes escenarios arquitectónicos y su gusto por el detalle. Mis libros:
The Magic City, Five Children and it, The Book of Dragons, The Enchanted Castle, The House of Arden, The Story of The Amulet, The Magic World, Oswald Bastable y The Phoenix and The Carpet no habrían sido lo mismo sin él.
Os dejo dos joyas de su trabajo: Peterkin y Puck of Pook's Hill (al final del articulo de wikipedia) y un video explicativo sobre técnicas de grabado The Engraver's process.
C.E. Brock
1870-1938
En febrero del año siguiente, un cinco para ser más exactos, nació Charles Edmund, en Holloway, Londres.
Conocido como el ilustrador de Jane Austen, Charles Edmund creció en el seno de una familia de hermanos artistas. Uno de ellos, Henry Mathew Brock, nacido al poco tiempo de que la familia se mudara a Cambridge, también fue un destacado ilustrador de la autora de Emma.
Ambos hermanos se formaron el estudio del escultor Henry Wiles y ambos comenzaron a publicar en Macmillan. De hecho, la célebre editorial le ofreció su primer encargo al cumplir veinte años, en 1890.
Después llegarían otros trabajos, como Humurous Poems, de Thomas Hoods (1893), Los viajes de Gulliver, de Jonathan Swift, (1894), Orgullo y Prejuicio, de Jane Austen (1895), Ivanhoe, (1897) y The lady of The lake, (1898) ambas de Sir Walter Scott y Vicar of Wakefield, de Oliver Goldsmith (1898).
Desde luego, si hubiera que destacar un año en su carrera artística, sería sin duda este último. En 1898 se publicó un conjunto de diez novelas de Jane Austen, hecho que relanzaría su carrera y le llevaría unos años más tarde a ser conocido en EEUU, donde el mismo conjunto se reeditó en 1906 bajo el título The Old Manor House Edition.
En los años siguientes seguiría publicando para Jane Austen hasta que en 1910 publica Lorna Doone, de Blackmore. Tras la posguerra llegaron ilustraciones de varias novelas de Dickens, como Pickwick Papers, The Cuckoo Cloth, de Mrs Molesworth y diversas publicaciones en periódicos como Punch o The Strand Magazine.
A lo largo de su carrera, Charles Edmund y sus hermanos trabajaron en un estudio donde cohabitan todo tipo de antigüedades, objetos curiosos, muebles exóticos, numerosos fashion plates y una magnífica colección de trajes de la Regency Era.
En cuanto a su estilo, teniendo en cuenta lo variado de los autores para los que ilustró -Dickens, George Elliot, William Thackeray y servidora- entre otros, sus dibujos a veces eran delicados, finos, un reflejo de la sensibilidad de los personajes que retrataban algunas novelas. En otras ocasiones, sus creaciones destacaban por la rudeza de los protagonistas, si se trataba de escenas bélicas o rurales.
Un claro ejemplo de este contraste podría verse en The Railway Children, 1906, donde el rostro de lo que Brock considera un hombre de campo, contrasta con la finura de los rasgos de Madre y Roberta, personajes de ciudad.
1870-1938
En febrero del año siguiente, un cinco para ser más exactos, nació Charles Edmund, en Holloway, Londres.
Conocido como el ilustrador de Jane Austen, Charles Edmund creció en el seno de una familia de hermanos artistas. Uno de ellos, Henry Mathew Brock, nacido al poco tiempo de que la familia se mudara a Cambridge, también fue un destacado ilustrador de la autora de Emma.
Ambos hermanos se formaron el estudio del escultor Henry Wiles y ambos comenzaron a publicar en Macmillan. De hecho, la célebre editorial le ofreció su primer encargo al cumplir veinte años, en 1890.
Después llegarían otros trabajos, como Humurous Poems, de Thomas Hoods (1893), Los viajes de Gulliver, de Jonathan Swift, (1894), Orgullo y Prejuicio, de Jane Austen (1895), Ivanhoe, (1897) y The lady of The lake, (1898) ambas de Sir Walter Scott y Vicar of Wakefield, de Oliver Goldsmith (1898).
Desde luego, si hubiera que destacar un año en su carrera artística, sería sin duda este último. En 1898 se publicó un conjunto de diez novelas de Jane Austen, hecho que relanzaría su carrera y le llevaría unos años más tarde a ser conocido en EEUU, donde el mismo conjunto se reeditó en 1906 bajo el título The Old Manor House Edition.
En los años siguientes seguiría publicando para Jane Austen hasta que en 1910 publica Lorna Doone, de Blackmore. Tras la posguerra llegaron ilustraciones de varias novelas de Dickens, como Pickwick Papers, The Cuckoo Cloth, de Mrs Molesworth y diversas publicaciones en periódicos como Punch o The Strand Magazine.
A lo largo de su carrera, Charles Edmund y sus hermanos trabajaron en un estudio donde cohabitan todo tipo de antigüedades, objetos curiosos, muebles exóticos, numerosos fashion plates y una magnífica colección de trajes de la Regency Era.
En cuanto a su estilo, teniendo en cuenta lo variado de los autores para los que ilustró -Dickens, George Elliot, William Thackeray y servidora- entre otros, sus dibujos a veces eran delicados, finos, un reflejo de la sensibilidad de los personajes que retrataban algunas novelas. En otras ocasiones, sus creaciones destacaban por la rudeza de los protagonistas, si se trataba de escenas bélicas o rurales.
Un claro ejemplo de este contraste podría verse en The Railway Children, 1906, donde el rostro de lo que Brock considera un hombre de campo, contrasta con la finura de los rasgos de Madre y Roberta, personajes de ciudad.
G. Spencer Pryse
1882-1956
Nacido en Aston, (Birmingham), y formado en escuelas de Londres y París, Gerald Spencer fue un artista muy célebre por sus litografías. Proveniente de una familia adinerada, pronto quedó huerfano y a merced de su tío, el cual, al casarse por segunda vez, (el tío)le acabaría denegando la herencia anticipada que Spencer le solicitó.
Dado que no podía permitirse una formación artistica en pintura al óleo, pues era lo tradicional y un signo de prestigio, Spencer eligió indagar en la litografía. Y la cosa salió bien. A los veinticinco, cosechó su primer éxito en la Exposición Internacional de Venecia, en 1907. Además, como fundador de The Neolith, una revista de literatura y bellas artes, Spencer contribuyó a revalorizar el arte la litografía; tanto fue así que en 1913, se convirtió en un miembro del Senefelder Club, una asociación encargada de promover dicha artesanía y donde pudo exponer sus trabajos.
Al estallar la Primera Guerra Mundial, Spencer trabajó como mensajero bajo las órdenes del gobierno belga, presenciando la caída de Ostend y Antwerp. La experiencia le sirvió para crear una serie de litografías llamadas Campaña de Otoño, 1914. Y sin embellecer, ni quitar ni poner nada, sus litografías se convirtieron en un testimonio artístico del conflicto. Por lo tanto, no era de extrañar que él mismo solicitase una plaza como Artista Oficial de la Guerra. Sin embargo, su ideología socialista, unida a su compromiso como soldado en la batalla, le alejaron de su objetivo. No obstante, en 1917 le concedieron la licencia para dibujar en la contienda, un documento nada baladí, pues le libraría de ser acusado de espionaje mientras ejerciese su labor.
Spencer Pryse fue un arduo defensor del Partido Laborista y miembro de la Sociedad Fabiana, la cual utilizó sus litografías para realizar numerosos carteles de propaganda socialista.
Y en lo que a mis libros se refiere, Spencer elaboró las primeras ilustraciones de La Ciudad Mágica, publicada por entregas en The Strand Magazine y después ilustrada por H.R. Millar en formato libro. También se encargó de los diseños de mi poema Jesus in London, de These Little Ones y de las creaciones de The Magic World , junto con Millard.
Aquí os dejo un video explicativo sobre la técnicas de grabado artesanal, que incluye la litografía.